La soledad recompensa la inspiración para escribir.

Ni arcas de plata y oro, ni un reino secreto, yo sólo sueño que mi corazón este lleno de amor. Apuesto a que no puedo ocultarlo, pero sólo es un camino en el desierto sin final, mientras tanto muero miles de veces y no hay un lugar donde pueda descansar.
Daniel O. R.

miércoles, 28 de noviembre de 2012

UNA SALIDA SURREALISTA


UNA SALIDA SURREALISTA
A Salvador Dalí y todos los surrealistas que ya se han  trasformado  en seres fantásticos y ahora son parte de sus pinturas abstractas.

Algunas veces la realidad es tan asombrosa que podríamos considerarla como algo que va más allá de lo fantástico y nos atrapa en el misterio de una realidad asombrosa. El mismo Salvador Dalí consideraba al surrealismo, no como una corriente artística más, sino como  una cuestión ambigua sobre lo real y los sueños, lo ficticio y lo verosímil, lo horroroso con la belleza y los miedos se convertían en mera tranquilidad. 
El surrealismo te atrapa y a su vez te sumerge en la fantasía sacada de la realidad, que se trasforma algunas veces en lo más increíble y extraño que puedas imaginar.
Y es que los escritores surrealistas juegan con la realidad y muestran que lo surreal resulta increíble y misterioso, ellos nos invitan a ser testigos de lo fantástico, a destapar nuestro subconsciente y romper las fronteras de lo normal, asombrándonos de nuestra capacidad creadora, simplemente nos convertimos otra vez en niños y esto es el fruto sublime de la narraciones y la poesía surrealista.
Andre Breton
Una salida surrealista

He buscado la manera alejarme de la absurda realidad que vivo a diario, me dispuse a buscar una salida de escape, sin embargo he pasó mucho tiempo sin encontrar alguna que satisficiera mi necesidad tan absurda. Un amigo, me dijo que la única manera de escapar era la muerte, quizás tenga razón, pero no creo que esa sea una buena expectativa. Buscando la solución durante toda la semana, desde los libros filosóficos, hasta las más extrañas substancias alucinógenas, no encontraba esa escapatoria tan deseada.
El cansancio llegó en todo mi cuerpo, sólo tenia las fuerzas necesarias para poner en mi estéreo un CD, lo escogí a la zar, al darle play empezó a sonar la magnifica y relajante música de blues, nada mas y nada menos que Pink Floyd, con la tonada exquisita de Echoes, valla que me relajo bastante, recostado sobre mi cama, saque un cigarro que guardaba detrás de un poster enmicado de los Doors, lo prendí y empecé a fumar mientras seguía escuchando la sublime música.
Creo que pasaron varios minutos, horas, quizás días, no lo sé, pero creo que la música de Pink Floyd y el cigarro estaban haciendo su efecto y me han trasportado a otra dimensión.
Fue agradable y mágico descanso durante esa noche de junio, fumando aquel cigarrillo extraño y escuchando la adictiva música psicodélica. Sedaron lentamente mi cerebro, mi cuerpo se quedo estático mientras que mi mente se elevaba a otra dimensión plagada de utópicos sueños frágiles que se quiebran al instante, dejando paso a otros sueños extraños y estos van entretejiendo una telaraña repleta de fumadas escenas surrealistas. Sorpresivamente llegó a mi mente una imagen extraña de una mujer con aspecto paliforme, con patas de gallina, tentáculos de calamar, sus senos grandes y desnudos, su cabellera de fideos muy larga que dos feos duendes van cargando a manera de penitencia.
 El rostro pálido por el sol, un largo y púbico bigote que se mueve con el viento, sus desproporcionados labios sensuales para quienes gustan de apasionados besos en el miembro sexual, un nariz con forma de gancho siempre dispuesta para destapar una botella de cerveza, sus ojos azules emanaron un destello violeta que me provocó una atracción fascinante por tocarle el vientre transparente y cálido, donde guarda un pueril niño que increíblemente tenía mis ojos, mis labios y mis orejas, incluso la misma cicatriz que tengo en mi pecho en forma demedia luna, quise tocarlo pero descubro que no estoy ahí, que solo fui un ente que admiraba confundido esa imagen surrealista que proyectó mi relajado encéfalo.La mujer enigmática se desvaneció lentamente en un humo azul emanando un olor a jazmín mientras iba pregonando una oración en latín.
Perdí la noción del tiempo, pero no importa porque creo que he encontrado la forma de escapar, Había estado esperando la oportunidad de escapar de la realidad que me quemaba por dentro y me hacia indefenso ante el cruel fantasma de la soledad, por fin puedo huir de mi tormento. Me convertí en prisionero de mis miedos siempre custodiados por la egoísta quimera de la confusión, siempre celosa y asechando mí libertad. Por fin he rompido las cadenas que ataban mis sentimientos, quiero volar lejos y formar un espacio fantástico, ser invisible ante el mundo, quiero crear una pintura surrealista donde solo los hombres libres conozcamos la verdadera interpretación.

Ya no necesito seguir buscando otra forma de escapar de la realidad, solo me bastaría repetir la misma sensación de esta noche fresca de junio acompañada de la sensual y delicada mujer convertida en psicodelia, siempre bohemia y musa de mis distorsionados sueños.
Daniel O. R.





martes, 27 de noviembre de 2012

Pequeños fragmentos de un solitario


                                               Fragmentos de un solitario
 
Mis deseos efímeros trasmutan en desamores encarnados como agujas de maguey clavadas en la piel quemada del indígena anegado y orgulloso de raíz, pero maldito en destino. Soledad en mis entrañas, hambrientas de mordiscos de almas compañeras y delicadas. Sediento de suspiros poéticos que estrujen mi pecho herido y llenen el vacio mortífero por la huida de el alba en mi delicado espíritu. Sigo los pasos de un lobo estepario, errante y con frio en la piel, con los huesos carcomidos por las pugnas cuerpo a cuerpo con el horror de la  vida. Sin embargo, estoy postrado a la orilla del risco de aquella montaña vieja y cansada.  Aullando mis pesares  a la luna como un Rapsoda declamando una triste lirica a la majestuosa Selene.  
 
Quiero descansar en mi lecho de tierra seca y arenisca, cubrirme con el manto negro de la noche, observando a los centinelas tintineantes de la obscuridad, mientras que  la luna acaricie  mi rostro cadavérico con su fría luz. Cerrar un instante mis ojos encrespados por el cruel viento que a su paso expedito levanta hebras de polvo gris y negro. Momento de obscuridad total, percepción de sonidos fastuosos, y resulta ser un concierto armónico de los arboles coreando en fraternidad con el viento y los insectos, acompañados en sintonía con el eco de un búho impaciente y hambriento de polillas de cristal.
 
Solo, hambriento y pensativo, he comprendido que soy un cerrar de ojos del tiempo, que la muerte siempre me asecha y estremece mis sentidos, congelan mi sangre y paraliza mis nervios. Pero ahora que estoy a punto de verte, eso ya no importa. El camino ha sido largo y he pelegrinado a un lugar olvidado, sólo con  mi esqueleto abrigado de carne roja, amarrado con  venas polvorientas y forrado con piel arisca del tiempo viejo. Sentado e impaciente para ver tu destello en el cielo obscuro, y esperando verte danzar a la salida del alba, mientras el fino abrigo del rocío cubre mi frio cuerpo. Pero un eco en mis entrañas me dice que en la morada de la muerte aún no ha cerrado y hay muchos vacantes, y esperan por mí… ¡No, no  quiero irme, quiero quedarme frente a tí! Para poder escapar un momento eterno de la gente que vive en el humo vicioso de la degradación.

Daniel O. R.
Brain Damege,Pink Floyd. Una canción que inspira hasta el más humilde escritor.